martes, 23 de junio de 2020

Continuidad de los programas.

Continuidad de los programas.


Las iniciativas esporádicas en los centros educativos, muchas veces provenientes de instituciones y empresas locales tienen una función motivadora y casi iniciática. Pero para estimular la competencia de aprender a emprender y lograr que esas prácticas se consoliden en los procesos educativos, es preferible que tengan una clara continuidad. 

En el caso de las experiencias esporádicas, que formen parte y se aprovechen para trabajarlas en las unidades curriculares previas y posteriores de las materias afines. En el caso de que sean organizadas en los centros, es recomendable que los programas cuenten con el tiempo necesario para crecer, y se repitan a lo largo de los cursos, ganando en calidad y eficacia, y desarrollando gradualmente sus objetivos de aprendizaje.

En todas las escuelas hay profesores excepcionales y capaces de conducir iniciativas realmente admirables y creativas para estimular el espíritu emprendedor. Pero los esfuerzos individuales tienen un impacto muy reducido y poco duradero en el desarrollo de los alumnos, cada vez sometidos a procesos de socialización más complejos y alejados del control de los adultos. 

Hoy es necesario contar con la creación de equipos de docentes que aporten su experiencia y sus recursos, aúnen los esfuerzos, generen experiencias de aprendizaje intensas y sofisticadas y se ayuden mutuamente para realizar su tarea educadora. Es importante crear redes de trabajo internas en la escuela y generar sinergias con todas las iniciativas que ya existen dentro y fuera, para ganar en efectividad y calidad educativa. 

Estas redes deben aprovechar también los recursos y apoyos de instituciones, empresas y ONG existentes en los contextos más próximos al centro, y también aquellas más lejanas dedicadas a este fin.

Equipo, Humanos, Negocios, Empresario

No hay comentarios.:

Publicar un comentario